lunes, 10 de enero de 2011

La leyenda del sueño vagabundo

Los vidrios de la ventana eran revestidos por el gris velo del frío viento
Y mis pensamientos quedaron atorados en ese silencioso momento
todo parecía estar manchado de un exquisito mutismo
y así me hundí en un hipnótico abismo
Abrí los ojos y tu rostro iluminaba la invernal brisa
Creí debilitarme por esa mueca conocia como sonrisa
Tu presencia quise entender
En medio de esa paz, tu inaúdito encanto comenzaste a extender
estabas tan cerca y tan lejos de mi tacto
que desprendí fuerzas para acercarme en el acto
quería deshacerme de esa intriga persistente
de tenerte dibujado en esas alucinaciones de mi cruel mente
sólo debo acrecarme más para poderte alcanzar
y poder develar el misterio que poco tiene de azar
Por fin! te acercas, me miras, me
Flores turquesas... 
parece que he dormido de más me debo levantar
Tengo súbitas ganas de esa canción olvidada cantar  
y este silencio gélido romper
ah pero que sueño acabo de tejer
porque eso es: un sueño... que seguirá vagando en mi mente
En busca de su  dueño.... 



La mágica burbuja que flota sin rumbo entre los espinozos azares de lo que muchos, a falta de explicación llaman destino

Había sido engendrada en las entrañas transparentes y frías del viento... su pureza se resguardaba en una cristalina y transparente superficie que encantaba la mirada. Su brillo reflejaba la luz que bañaba su redonda figura. Mágico era su andar, que a su paso dejaba destellos que arrancaban sonrisas y dibujaban suspiros. Era pura, incolora y soñadora... Así nació la burbuja de mi vida...

Emprendió ignorante su camino, encantando mi vida, moldeando mis sueños, hipnotizando mis sentidos, sobre exponiendo mis miedos.
Con un vaivén seguro se adnetró en la mortalidad de un mundo incapaz de comprender su frágil y sublime naturaleza...

 !que no reviente mi vida junto con tus traslúcidos vuelos! que la lluvia de lágrimas no destruya tu existencia...
Porque mi vida, querida burbuja estallará, con un fino plop junto a ti 

Sólo por esta noche

Tanto por lo cual llorar en mi vida
deambulo junto con mi alma partida
Cenizas, de una paz que yace calcinada
Culpa de una gran pena que flota callada
dentro una tristeza tal vez magnificada
Pero entre tanta pena y pesar
existe una razón que aun hace mi alma cantar:
Sobre esta benévola noche,
mi felicidad es un derroche

Quiero mi sueños atar hoy a tu respirar
y que esta noche detenga piadosa su andar
Borra afímeramente el dolor que me tiene atrapada
haz que esa amargura huya como una memoria aterrada

Te miro a través de esta silenciosa oscuridad
dándole a tu fina presencia toda mi prioridad
Eres dueño por esta noche, de todo lo que soy
Haz olvidarme de todo, incluso del día de hoy

Envuélveme en un grisáceo manto de mentiras verdaderas
de cosas que mañana serán incerteras
Llévame bajo el ala de la esperanza, hazme necesitarte
tanto como una súplica o una añoranza

Embrújame bajo el encanto de una noche sin igual
quiero huir de mis miedos con tu roce angelical
Es lo que anhelo, en esta noche de euforia
Que te lleves en unsuspiro amor mío toda mi memoria
Hazme por hoy olvidar, borrar,enterrar
todo lo que mañana sin piedad he de recordar 

Ahogando las penas

Lo miré hundirse desde la superficie...

El agua cristalina distorsionaba una y otra vez su rostro
Poco a poco fue alejándose
Todo aquélla realidad quedó cerrada, como su mirada
Fue una pena solitaria y callada
se marchaba mojado, atolondrado...
La verdad se llevaba presa dentro de su cabeza
Y esa fue su torpeza, ahora se hunde, 
La tristeza en mis versos ya no se difunde
Muere, ahógate, recibe el adiós que causó 
Tu silencio atroz
La pena silenciosa, el merecido temido

Húndete, aléjate, 
y en la gélida prisión no encontrarás redención
Ahora bien
Se despide de ti una lúcida razón un inmóvil corazón
que no se inmuta al mirarte marcharte
y así la historia se humedece de olvido al ahogarte...

Ahora debo partir,mi corazón comienza a latir 
pues lejos de este turbio mar
he encontrado a quien amar

La perturbadora belleza de la soledad

Tumbada en la húmeda hierba, miraba el cielo. La noche era gélida sin duda, incluso podía observar como cada una de mis exhalaciones se transformaba en un humo que desaparecía en la oscuridad del entorno.

El negro manto, salpicado de esos brillantes astros, tenia hipnotizada mi cabeza, que trataba de comprender como era posible que la belleza flotante de aquellas estrellas, pudiera ser visible ante los ojos que cada vez se olvidan de levantar la mirada y contemplar algo tan formidable... -quizá la gente que habita en mi ciudad, no este habituada a tal espectáculo- pensé para mis adentros.

Me levanté sintiéndome algo mareada, pero seguí andando entre la espesa hierba, mientras extraños sonidos nocturnos y los chirridos de mis tenis sobre la humedad del pasto, le brindaba a mis pasos un ritmo un tanto musical. Cada uno de mis pasos estaba salpicado de una extraña melancolía, haber mirado esas estrellas en soledad, me hizo sentir un sabor amargo en mi saliva...

Continué andando, y las lágrimas no tardaron en recorrer mis mejillas, inmediatamente sentí su sendero calido por mi cara... no pude detenerlas. Pero seguí andando. Nunca amaneció. Las noches seguían siendo frías y perturbadoramente hermosas, pues ¿a quién podía contarle sobre los milagros de la vida?

Seguí andando entonces. Cayendo a veces, pues mis pies no soportaban el peso de la tristeza. Esas caídas me hicieron sangrar... y mientras esa sangre corría por mi piel, maldije esa soledad, maldije esas bellas estrellas, ese seductor firmamento, los maldije hasta que la voz se escapó de mis fuerzas...

Y aun así, seguí andando: sola, herida, muda, con un caminar lastimoso y un millar de lágrimas tatuadas en mi cara...

Anduve y anduve... Y así como llegó esa noche melancólica, amaneció... y la noche toda la sangre se llevó...

IX

Un cuervo se enamoró… 
Un día que triste por los grises cielos voló 
Este amor se encontraba en el ancho mar 
Dónde por cuestiones de azar 
Un bello pez de colorido aspecto miró 
Y el pequeño cuervo de su dulzura se prendió 
¡Qué infeliz sería aquélla criatura! 
Aquél platónico amor se convertiría en su sepultura 
Pues cómo poder encontrar
Los límites entre el cielo y el mar?

Amor espectral

Entre las sombras me escondo
y através del velo de tus sueños yo rondo
Resguardando tu camino
Protegiendo de la fatalidad a tu destino

Yo siempre tan imperceptible
tan callada
Pues siempre seré invisible ante tu mirada

Convertí tu dolor en propio
haciendo de tus tristezas mi mortal opio
Y aún cuando pensabas que tus miedos jamás ibas a vencer
en la lejanía de una habitación
rezaba para que no dejaras de creer

De tu vida me has borrado
convirtiéndose este hecho en mi gran trago amargo
Y es así como en el sepulcro de tu memoria
me encuentro en un profundo letargo

Algunas veces cuando no hay a quién recurrir
en tus horas alúcidas al dormir
invocas mi fantasma
pero yo sé que en ello
no debo tener esperanza
pues allá donde tu plácida vida mora
no hay lugar para mi espíritu que aún llora
Ya que en aquél bello lugar
un desperfecto se vuelve mi amar...

Mi evanescente e incondicional amor por ti
es imposible
ya que además de ser éste invisible
Dime tú
¿Cómo poder amar a quién tanto te esforzaste en matar?